7 Beneficios de comer Chocolate negro para mejorar la salud

¿Quemar grasa mientras estoy sentado es posible?

Quemar grasa mientras estoy sentado es posible

¿Es posible que pueda quemar grasa mientras estoy sentado(a) en un sillón en mi trabajo, en mi casa, en la universidad o en otra parte?

Es posible quemar grasa mientras te encuentras sentado(a), pero para ello tienes que realizar ejercicio de manera constante. Esto aplica tanto para hombres como para mujeres.

Bueno, esto claro si quieres aumentar esta quema de grasa mientras te encuentras sentado o sentada, porque una persona sedentaria puede quemar algo de este sustrato energético oxidable en esta posición, simplemente que no lo hará en las mismas cantidades en las cuales lo haría una persona de la misma edad y el mismo sexo que tenga una tasa metabólica más alta gracias al ejercicio.

El truco para aumentar las cantidades de quema, eliminación u oxidación de las grasas que se almacenan en tu tejido adiposo y visceral es el aumentar tu tasa metabólica basal por medio del ejercicio, principalmente practicando aquellos de alta intensidad y en menor medida los de intensidad moderada.

Aumenta la quema de grasa mientras estás sentado leyendo, viendo tv, hablando, etc.


Ten en cuenta que nuestro cuerpo está consumiendo constantemente energía proveniente de distintos sustratos energéticos (glucosa, aminoácidos, ácidos grasos), y que en estado de reposo y aun mientras dormimos, este consumo energético se da siempre aunque por obvias razones tiende a ser mayor o menor de acuerdo a cada persona.

Mientras dormimos nuestro cuerpo utiliza una gran cantidad de energía proveniente del glucógeno hepático (en forma de glucosa para la posterior generación de ATP) para alimentar a nuestro cerebro y sistema nervioso.

Algo que ocurre en mayor medida cuando estamos concentrados estudiando, leyendo, hablando, aprendiendo algo, etc.

Durante el tiempo de sueño también se queman Calorías provenientes de las grasas de reserva, y quienes logran una mayor quema de grasa durante las tantas horas de sueño y en otros momentos de relativo reposo o descanso, son quienes gracias al ejercicio mejoran su fuerza, resistencia muscular, hipertrofia y por ende su tasa metabólica basal.

Y también gracias a la mejora en la capacidad aeróbica y potencia aeróbica por medio de los ejercicios principalmente de resistencia, lo que significa la mejora en la captación y utilización de oxígeno para "quemar" los sustratos energético oxidables (glucosa, ácido láctico y ácidos grasos, estos últimos provenientes de las grasas de reserva).

Y en cuanto a la potencia aeróbica, se trataría de mejorar el bombeo sanguíneo y por ende toda la acción del sistema cardiovascular, para que la sangre oxigenada y nutritiva llegue en óptimas condiciones y de manera oportuna hasta los músculos más distales del organismo.

Se quema grasa mientras estás sentado, de pie y caminando


Nuestro cuerpo consume energía constantemente, sobre todo para mantener en óptimas condiciones a nuestro cerebro el cual puede consumir el 20% o más del total de nuestra energía dependiendo de la actividad o ejercicio realizado y la duración e intensidad del mismo.

Nuestro cuerpo también quema o utiliza energía para manteneros a una temperatura corporal constante y fuera de peligro, y para otros otros procesos como la digestión o la regeneración celular.

Lo que se denomina como metabolismo basal o tasa metabólica basal es la cantidad de energía que nuestro organismo gasta cuando se encuentra en un total estado de reposo, es la cantidad mínima de energía requerida para cumplir con los procesos vitales que nos permiten vivir.

Esta energía la obtenemos, claro está de la comida, especialmente de los carbohidratos los cuales se degradan hasta glucosa y posteriormente son sintetizados en forma de glucógeno en nuestro hígado y tejido muscular esquelético.

Por supuesto las proteínas y las grasas también aportan Calorías o kilocalorías (es lo mismo).

Los carbohidratos o en este caso mejor dicho: "el glucógeno" que luego se degrada a glucosa, es lo más fácil y rápido de utilizar puesto que puede generar energía con o sin la acción del oxígeno.

Aumenta tu capacidad aeróbica para aumentar la quema de grasa mientras estás sentado, de pie, haciendo ejercicio, etc.


Debes entrenar para que tu organismo sea capaz de captar y utilizar más oxígeno en procesos energéticos oxidativos aun cuando realices ejercicios de alta intensidad.

El lograr este objetivo es una de las razones por las cuales los atletas de alto rendimiento pueden lograr buenos resultados deportivos y tener cuerpos con bajos porcentajes de grasa corporal (bueno, hay unos que tienen altos porcentajes de grasa, esto depende de la rama deportiva).

Pero ante lo anterior podríamos decir que se trataría de grasa intramuscular y no grasa adiposa, lo cual hace una gran diferencia.

Algo que se conoce como paradoja del atleta donde a pesar de tener altos niveles de grasa, ésta puede ser muy bien utilizada en procesos energéticos que permiten optimizar el rendimiento del atleta.

Todo sin que su salud se vea afectada de forma negativa.

Muchas personas que se ejercitan y suelen pasar el 55% de su capacidad aeróbica (VO2máx) tienden a requerir quemar menos grasa durante el ejercicio y entonces pasar a utilizar más glucógeno (también algo de fosfocreatina, ATP directo y fosfatos).

Además, el hecho de tener una menor capacidad aeróbica no solamente no les permite quemar buenas cantidades de grasa sino que tampoco les permite el hecho de poder reutilizar buenas cantidades de ácido láctico, y por ende la fatiga durante el ejercicio suele presentarse rápidamente.

Si por ejemplo ahora tienes un consumo máximo de oxígeno de 2 litros por minuto y esto lo lograste obtener manteniendo tus pulsaciones por minuto entre el 60% y 75% de tu frecuencia cardíaca máxima.

Entonces habría que estipular un programa de entrenamiento que permita mejorar este consumo en un 30% a tres meses y en un 50% a dos años.

Porque la curva general de adaptación al ejercicio dictamina que en promedio para mejorar en un 50% esta captación de oxígeno, se necesitarían en promedio dos años de ejercicio constante y bien dosificado. Lo bueno es que en tan solo tres meses esta capacidad se podría mejorar en un 30%. De ahí se torna cada vez más difícil mejorar.

Pero un 30% es algo muy bueno, o sea que si entrenas bien entonces tu capacidad de consumo de oxígeno podría mejorar en tres meses hasta lograr un volumen de 2,6 litros por minuto en este mismo rango de pulsaciones por minuto (60% - 75% de tu Fcmáx), lo cual ayudaría a que puedas consumir y utilizar más oxígeno y por ende quemar más cantidades de grasa aun cuando te ejercitas a una intensidad mayor (más pulsaciones por minuto).

Y por supuesto todo esto ayudaría a mejorar también la quema de grasa mientras te encuentras sentado(a) viendo tv, leyendo algún libro, hablando con alguien, e incluso aumentaría considerablemente mientras estés durmiendo.

El entrenamiento de resistencia bien dosificado que te permita quemar más grasa mientras estás sentado


Si eres principiante o aun si eres un poco más avanzado, lo más adecuado es que por unas cuantas semanas te ejercites aplicando en tu rutina ejercicios de resistencia, ejercicios de estructura cíclica sin pesas (trote, nado, bici, etc.) por tiempos prolongados (40 minutos o más) y aun ritmo constante, más o menos entre el 60% y 75% de tu frecuencia cardíaca máxima.

Por supuesto estos niveles de intensidad y duración de este tiempo de ejercicio varían de acuerdo a cada persona, a su edad, su sexo, su nivel inicial de condición física, etc.

De ahí que el papel de un buen entrenador es muy importante para dosificar bien las cargas para evitar la fatiga y para promover buenas adaptaciones fisiológicas.

Luego se deben plantear estos mismos ejercicios con picos de intensidad, o sea por ejemplo durante 1 a 2 minutos aumentar la velocidad y por ende las ppm, y luego bajar la intensidad hasta un tiempo que permita volver al rango de entre el 60% y 75% de la FCmáx, y volver a aumentar y mermar, y así, de manera alternada para también estimular la mejora de la potencia aeróbica.

Esto se puede combinar con ejercicios de fuerza con o sin pesas, los cuales ayudan a mejorar la mencionada fuerza, la potencia aeróbica, la resistencia muscular, y también influyen en la creación de mitocondrias (organelas captadoras de oxígeno), aunque sea en un mejor porcentaje (10% - 15%).

Se puede quemar grasa mientras se está sentado sin realizar ejercicio


No. De hecho la vida sedentaria te llevará cada vez más a quemar menos grasa. No existen fórmulas mágicas como por ejemplo los famosos suplementos quemadores de grasa que prometen hacerte quemar grasa a lo loco así porque sí.

Si una persona que consumas píldoras o polvos mágicos que dicen ayudar a quemar grasa mientras vez televisión, mientras duermes, mientras estudias, etc., realmente no lo hará por el consumo de estos productos sino por el gasto Calórico que pueda realizar gracias a la acción de los programas de entrenamiento y por las modificaciones en la dieta que sí o sí tuvo que realizar.

Tampoco es bueno armar un plan nutricional improvisado, porque muchas personas logran bajar de peso gracias a la malnutrición, o sea llegan a logra reducir sus niveles de grasa corporal en algún porcentaje pero también reducirán su nivel de masa muscular y densidad ósea en porcentajes aun mayores, lo cual no es algo saludable.

Así que deja la pereza y comienza a ejercitarte no solamente por estética sino también por salud.



¿Tienes algo que decir sobre este artículo? Compártelo con nosotros en:

siguenos en facebook sígueme en Instagram Canal de youtube siguenos en Twitter