Muchas veces las mujeres embarazadas se ven afectadas por efectos de depresión: estudios muestran que una de cada cinco mujeres sufre de este mal, y muchas veces unas no son diagnosticadas y no necesariamente se trataría de embarazos no deseados.
Aunque en el pasado una mujer no haya tenido problemas de ansiedad o sufrido los males de la depresión, durante el embarazo es posible que los pueda padecer aun cuando se haya planeado tener el futuro hijo o hija.
El embarazo y los cambios hormonales que afectan todas las emociones
No está demás resaltar que la etapa del embarazo es una época muy "linda" he importante en la vida de las mujeres.
Sin embargo, las consecuencias secundarias que se sufren a nivel hormonal, corporal, incomodidad con el físico entre otras cosas, aumentan a medida que avanza el embarazo, además de las alteraciones del sueño que pueden provocar cierto nivel de estrés.
Es ahí donde la pareja debe llenarse de mucha más paciencia para entender por los cambios por los que está pasando su hermosa embarazada. Se trata de tolerar al máximo todos los efectos reflejados por causa del estado de embarazo y todo lo que provoca.
Si bien las mujeres siempre han sufrido de cambios de ánimo muy fuertes (unas más que otras) por causa de lo relacionado al período menstrual, con el embarazo esto se potencia a su máxima expresión. Pero es muy entendible: es que cargar con una vida dentro no debe ser algo fácil.
La incertidumbre del nacimiento, la depresión y la ansiedad: todo suma
Una época llena de ilusiones para muchas mujeres, no obstante, para otras es un tiempo en que la incertidumbre las consume porque no saben en que condiciones va a nacer el bebé.
Muchas se alteran porque no saben cómo evolucionará la salud de ellas mismas durante este período, la relación con la pareja (si va a mejorar o empeorar) y otras cosas que también son muy importantes como el aspecto económico que entra en la manutención futura de sus hijos y de ella misma.
Todo esto puede llevar a niveles medios o severos de ansiedad y/o depresión que puede alterar la vida tanto de ella como de su futuro bebé o bebés.
De ahí que muchas veces la depresión puede ser una causa justa y suficiente para programar un "aborto saludable" (porque estaría en riesgo la vida de la madre).
NOTA: Tal vez te interese leer si es posible hacer el amor durante el embarazo y cómo hacer para evitar riesgos.
El apoyo de los seres queridos es crucial para evitar los efectos negativos de la depresión
La familia, los amigos, los colegas, todos pueden influir de manera positiva o negativa durante el embarazo de cualquier mujer en cuanto a la depresión se refiere y al estado de estrés que puede mejorar o empeorar la salud general de la futura madre.
Si la depresión no es tratada a tiempo, ésta puede traer graves complicaciones durante el embarazo, entre estas podemos nombrar:
- Aumento de la presión arterial: esto puede contribuir además a que la madre pierda mucha agua y nutrientes durante el embarazo lo cual puede poner en riesgo su vida y la del bebé.
- Riesgo de enfermedades cardíacas: obviamente este factor puede ocasionar una muerte súbita. Dependiendo la fase del embarazo quizá pueda ser posible salvar al menos al bebé.
- Estrés por el aumento o disminución en la producción de algunas hormonas, lo cual afecta de forma negativa la salud del bebé y el físico de la madre, lo cual deriva en más depresión con lo cual la madre puede llegar a experimentar hasta condiciones suicidas o "abortivas".
- Partos prematuros (que puede acarrear complicaciones psicomotrices en el bebé) o bebés con muy bajo peso al nacer.
- Además, la depresión puede continuar después de haber dado a luz si no es tratada a tiempo.
NOTA: aprende lo que debes hacer para recuperar tu figura después del período de embarazo.
Los problemas que sufren los bebés luego de nacer cuando la madre sufrió de mucha depresión durante el embarazo:
Cuando los niños presentan problemas en su desarrollo general durante las primeras etapas de vida y sobre todo en la pubertad, como puede ser el hecho de sufrir de ansiedad, presentar problemas de atención y comportamiento, puede deberse a que son hijos e hijas de madres que sufrieron de mucha depresión durante el embarazo o después del parto.
Puede deberse tanto a algo genético que fue cambiando durante esas altas cargas de depresión como también al simple hecho de que luego del parto se siguió con la depresión, y de esta forma es muy poco probable que estas madres puedan ser capaces de atender las necesidades de sus hijos.
En conclusión la depresión no solo llega a afectar a la madre, sino también a sus futuros hijos y al resto de seres queridos que rodean su entorno.
¿Cómo se siente una persona deprimida sobre todo cuando está embarazada?
- No solamente el hecho de estar tristes es un síntoma de depresión. La energía disminuye (suele confundirse con anemia) y por tanto resulta muy difícil realizar las cosas por más simples que sean, hasta la tarea más pequeña y fácil puede tornarse o parecer imposible. Si una persona disfrutaba antes de alguna actividad con pasión, con la depresión es casi imposible que pueda si quiera realizarla, o si la realiza no la disfrutará y de hecho puede llegar a aborrecerla.
- La noción del tiempo se pierde totalmente y siempre juega en contra. Si hay depresión y se necesita que el tiempo pase rápido, se sentirá que pasa demasiado lento y viceversa.
- Frecuentemente una persona deprimida intenta evitar a los demás aislándose a si mismos. Aunque haya sensación de cansancio es difícil conciliar el sueño y una vez conseguido es difícil levantarse.
- La vida de pareja disminuye en su parte íntima considerablemente trayendo como consecuencias problemas como peleas e inclusive rupturas de la relación. Si no se tiene pareja siempre va a haber una sensación de vacío interno.
- No hay autoestima ni confianza para acercarse a alguien del sexo opuesto por quien se está atraído. Llegando a extremos, muchas veces las personas con depresión tienden a tener actos suicidas o al menos a pensarlos para evitar así el sufrimiento que esto les ocasiona.
Para concluir, la depresión afecta de manera directa la capacidad de la persona de afrontar su vida diaria en el aspecto familiar, social, laboral y/o afectivo y además, en el caso de las mujeres en embarazadas, esto puede afectar también a sus futuros hijos o hijas.
NOTA: conoce cómo debe ser la nutrición por cada etapa de vida.
¿Qué hacer para combatir la depresión durante el embarazo y luego del parto?
Para evitar que una mujer en estado de embarazo o madre novata sufra de presión, se pueden hacer cosas muy sencillas y que no requieren altos gastos de dinero:
- Hacer ejercicio: hacer ejercicio, preferiblemente en compañía, es crucial para que los niveles de estrés y depresión disminuyan considerablemente. Siempre es mejor hacer todo en compañía para poder distraerse más y mantenerse más ocupada. El ejercicio además permite una liberación alta de endorfinas. Las mujeres en estado de embarazo también pueden hacer ejercicio.
- Hacer ejercicio o practicar algún deporte: Esto debe ser guiado por un profesional capacitado para este fin, sobre todo cuando la madre aun está en embarazo. Hacerlo permite además controlar el peso y las medidas para que la figura luego del parto no cambie de forma excesiva. Lo digo porque muchas mujeres se deprimen cuando no pueden lucir un físico que consideran atractivo.
- Alejarse de la vida moderna: lo mejor para una madre embaraza y para su pareja, es poder alejarse sino siempre al menos unas cuantas veces al mes del estrés que ocasiona la vida moderna. Una ida al campo, un viaje corto a algún pueblo cercano o a unos termales, etc., pueden ayudar a liberar el estrés y disminuir los riesgos de padecer depresión.
- Salir con amigos y amigas: a veces es necesario poder compartir más tiempo con seres queridos diferentes a la familia y a la misma pareja. Una ida al cine, a cenar o al campo con amigos y amigas, es genial para que la depresión no se apodere de la mente.
- Evitar todo aquello que contamine tu cuerpo: aliméntate de forma saludable (elimina azúcares refinados y grasas saturadas), haz ejercicio al menos 4 veces a la semana, no te quedes encerrada, evita la exposición extrema al sol y a la contaminación ambiental, aléjate de personas tóxicas aun si se trata de familiares, etc.
- Buscar ayuda profesional: cuando nada de lo anterior funciona (que usualmente sí que funciona), o aun sí llegaras a sentirte mejor, no está demás que puedas hablar con un profesional que te ayude a sobrellevar la situación para poder afrontarla de la mejor forma tanto por ti como por tus hijos e hijas, tu pareja y tus seres queridos. Ellos y ellas también sufren al verte deprimida.
¿Tienes algo que decir sobre este artículo? Compártelo con nosotros en:
